Cristina cerró su campaña con un llamado a la "unidad nacional" pero advirtió: "No soy neutral"
19 de octubre de 2011 • 21:50

La presidenta Cristina Kirchner cerró hoy su campaña electoral con un nuevo llamado a la "unidad nacional", pero remarcó que la lucha contra la desigualdad "no es de imparciales" y ella no es "neutral".

En el Teatro Coliseo porteño, donde estuvo acompañada por gobernadores, ministros, intendentes, legisladores, dirigentes sindicales, de derechos humanos y la juventud, Cristina combinó la confianza de quien se sabe ganador con la emoción por el recuerdo de su esposo Néstor Kirchner, fallecido hace casi un año.

En ese marco, sostuvo que la muerte de su compañero la obliga a "abrirse cada vez más, tender la mano e intentar superar las diferencias hablando, debatiendo".

Sin embargo, remarcó que "siempre va a ser con políticas de inclusión social y de defensa de los sectores mas vulnerables" y advirtió que está dispuesta a "desarrollar todas las políticas que ayuden al crecimiento de 40 millones de argentinos".

"Esta no es una lucha de imparciales. Yo no soy neutral. Siempre voy a estar del lado del combate contra la desigualdad", apuntó la mandataria sobre el cierre y recibió el aplauso de todo el auditorio, en el que se encontraba también sus dos hijos, Máximo y Florencia, y el secretario general de la CGT, Hugo Moyano, con quien tuvo nuevos roces en los últimos días.

En su discurso, la Presidenta -a quien todas las encuestas otorgan más del 50 por ciento de los votos de cara al domingo- se dirigió directamente a los sectores empresariales y sindicales, y pidió a "todos los espacios que defienden sus intereses comprendan" que ella debe "articular los intereses de los 40 millones de argentinos".

Un mensaje similar envió a los dirigentes de la oposición, a quienes convocó "a trabajar por una Argentina diferente como punto de unidad para superar diferencias sin perder identidad" y les pidió acompañamiento en el Congreso "a las políticas que han ayudado a la redistribución social y a la generación de empleo".

Además, dejó un planteo a la propia tropa: "Les pido a todos los hombres y mujeres que tiene responsabilidades institucionales y que se sienten identificados con este proyecto que dejemos de lado cuestiones menores, cosas que se publican y que tienen poco que ver con lo que esta pasando. Les pido a todos mayor inteligencia", dijo.

En su última presentación antes de las elecciones y acompañada por su vice, el ministro Amado Boudou, la mandataria indicó además que ante la crisis económica mundial la Argentina tiene que "redoblar los esfuerzos" para profundizar el modelo y remarcó que el país "está en una posición en la que por primera vez puede pensar a mediano y largo plazo, algo que en el país no sucedía desde hacía mucho tiempo".

"Siempre había un plan salvador que fracasaba y que era reemplazado por otro plan que se hacía afuera y acá se ponía el sello y, en el Parlamento, los votos", expresó la Presidenta para enfatizar luego su voluntad de potenciar la integración regional en América del Sur.

Destacó, a propósito, que "estamos en un momento turbulento, en el que se están cayendo los íconos que afortunadamente no nos convencieron de que lo que estábamos haciendo estaba mal, que debíamos cambiar" y sostuvo que "la Argentina tiene una oportunidad histórica".

"¡Somos gente del Mercosur, esta es nuestra tierra! Tenemos la decisión definitiva de pertenecer a la América del Sur y tomar las decisiones en conjunto. Somos orgullosamente sudamericamos y sabemos que la clave de una integración inteligente", apuntó.

En las primeras filas del teatro, donde la mandataria también cerró su campaña para las primarias, estuvieron los gobernadores Daniel Scioli, Juan Schiaretti, Walter Barrionuevo, José Luis Gioja, José Alperovich, Celso Jaque, Maurice Closs, Gerardo Zamora y Oscar Jorge.

También los ministros del gabinete en pleno, legisladores, funcionarios, el líder de la CTA oficialista, Hugo Yasky; la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, y la de Abuelas, Estela de Carlotto.

De los intendentes del conurbano se vio a Fernando Espinoza (La Matanza), Darío Díaz Pérez (Lanús) y Alejandro Granados (Ezeiza) y asistieron además los dirigentes de organizaciones sociales afines al Gobierno como Luis D Elía y Emilio Pérsico y los actores Lito Cruz y Andrea del Boca.

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